Bien sabido es que la miel es beneficiosa para la salud de las personas, ya que tiene un alto contenido en minerales, vitaminas y oligoelementos. Se trata de un producto con múltiples propiedades, perfecto para endulzar nuestras bebidas, para preparar recetas y para usarla en trucos caseros.

El problema es que no siempre compramos la miel que creemos y a veces, sin darnos cuenta, compramos miel adulterada. La forma más fácil de averiguarlo es analizando el etiquetado a la hora de comprarla, pero hay ocasiones en las que ni por esas queda claro.

Si quieres saber qué es la miel adulterada y cómo podemos identificarla para evitar su consumo, te invitamos a leer este post.

 Miel pura VS miel adulterada

La miel es el producto más natural y saludable que podemos obtener de las abejas. Sin embargo, muchas de las mieles que son comercializadas en el mercado han sido procesadas y sometidas a modificaciones. Estas alteraciones ejercidas sobre la miel no solo implican que pierdan sus propiedades, sino que además contienen sustancias químicas.

Lo recomendable, como hemos mencionado anteriormente, es fijarse en el etiquetado. Pero si éste no está claro, o hemos adquirido la miel en una granja y nos la han vendido sin etiqueta, existen algunos trucos que nos van a permitir detectar si la miel es pura o está adulterada.

Miel pura

La miel pura es el producto que fabrican las abejas y que no tienen ningún tipo de añadido ni procesado. Básicamente es la miel que se recolecta tal cual de la colmena y posteriormente se envasa para su distribución. Entre las propiedades de la miel se encuentran la antibacteriana, antiviral y antifúngica, por lo que es importante asegurarse de que la miel que vamos a consumir es pura.

Es necesario mencionar que esta miel puede ser sometida a un proceso de pasteurización a 63 grados. Cuando esto se produce, se conoce como miel pasteurizada, y no podría utilizarse con fines terapeúticos.

Cuando adquirimos miel en el mercado, lo ideal es fijarse en la etiqueta. Si en ésta se ven expresiones tales como “jarabe de alta fructosa” o “glucosa comercial”, nos indica que la miel ha sido tratada y se le han añadido aditivos para que no se solidifique. También puede incluir agua, edulcorantes artificiales o azúcar.

Miel adulterada

La miel adulterada consiste en la combinación de miel pura junto con jarabes de maíz, caña de azúcar u otras mieles de poca calidad, y que tienen un alto contenido de agua. Este tipo de miel carece de nutrientes y solo aporta al organismo azúcares vacíos.

La miel adulterada es mucho más líquida que la miel pura y, dependiendo de los aditivos que se hayan utilizado para su elaboración, es una miel de olor fuerte o una miel de olor casi nulo.

Trucos caseros para reconocer la miel adulterada

No es fácil saber a ciencia cierta si la miel que vamos a consumir es pura o adulterada. Sin embargo, existen una serie de trucos caseros que nos pueden ayudar a identificar si la miel es o no de buena calidad.

Leer el etiquetado para conocer sus ingredientes

Lo primero que debemos hacer cuando vamos a adquirir un bote de miel es analizar su etiquetado y comprobar que no se incluyen los términos “jarabe de alta fructosa” o “glucosa comercial”. Se trata de dos aditivos que hacen que la miel se estire y no se solidifique. Otros ingredientes que deberían observarse son el agua, el azúcar y otros aditivos.

Prueba de la cristalización

Cuando la miel pura alcanza temperaturas inferiores a los 25ºC, se solidifica debido a su alto contenido en azúcar. El truco está en introducir la miel en el frigorífico, dejarla reposar durante varias horas y después comprobar si se ha solidificado o no.

Con agua

En un recipiente colocamos una cucharada de miel que extenderemos superficialmente por la base. A continuación, añadimos un poco de agua sobre la miel y realizamos movimientos circulares con el recipiente.

Si la miel es pura, aparecerá un dibujo similar a una colmena. Si la miel está adulterada, no aparecerá nada.

Con el pulgar

Colocamos un poco de miel en nuestro dedo pulgar y comprobamos si ésta se mantiene o se desliza por el dedo. La miel adulterada tiene un mayor contenido de agua por lo que, si la gota de miel que hemos colocado en nuestro dedo se desliza, nos indicará que no se trata de miel pura.

Con fuego

Para este truco debemos tener cuidado y tomar precauciones. La miel pura es inflamable, por lo que bastará con impregnar un algodón en un poco de miel y ponerlo en contacto con el fuego. Si prende, se trata de miel pura.

Con vinagre

Se trata de mezclar una cucharada de miel con un poco de agua y añadir dos o tres gotas de vinagre. Sabremos que se trata de miel adulterada si, al realizar esta mezcla, se forma algún tipo de espuma.

Con calor

Si ponemos a calentar miel pura, ésta se caramelizará inmediatamente. Si se trata de miel adulterada, comenzará a hervir y se evaporará.

Conclusión

Es todo un beneficio poder aprovecharnos de un producto tan natural y lleno de propiedades como la miel. Asimismo, es importante apoyar el trabajo de todos aquellos apicultores que se encargan de producir miel pura y de buena calidad. Por ello, te animamos a realizar estos sencillos trucos para que puedas elegir la miel más pura y aprovecharte de sus beneficios.

Por supuesto, en GOinsitu apoyamos a los pequeños productores de mieles puras, crudas y ecológicas.